Apoyo del INYM a la EFA de Colonia Unión, que crece con trabajo cooperativo
La Institución acerca becas estudiantiles y asesoramiento técnico en la producción sustentable, contribuyendo en la formación de los estudiantes, todos hijos de productores y trabajadores de yerba mate
Los habitantes de Colonia Unión hacen honor al nombre del lugar. El trabajo cooperativo al servicio del bien común está a la orden del día y se refleja en la Escuela de la Familia Agrícola (EFA), donde profesores, padres y alumnos encaran juntos la construcción de nuevas aulas y un incipiente vivero de yerba mate, la yerba que también está presente como materia en las aulas y como práctica en el terreno.
Tamaña tarea cuenta con el respaldo del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) mediante la asignación de becas a 16 estudiantes y la presencia del ingeniero agrónomo Damián Rivero, del Servicio de Extensión Yerbatero, quien presta servicios en el lugar.
El establecimiento comenzó a funcionar en el 2011 con 35 estudiantes y actualmente cuenta con una matrícula de 100, distribuidos de primero a séptimo año en la educación secundaria.
El sistema es de alternancia: los jóvenes permanecen 15 días en la Escuela y otros 15 días en sus hogares. “Esas dos semanas que están en sus casas, nuestros docentes los visitan para asistirlos en tareas que deben realizar tanto en las carpetas como aplicando las técnicas de producción agropecuaria en las chacras, y también para conocer la realidad de cada alumno porque eso nos permite impartir con más eficiencia la enseñanza”, explicó el rector Nahuel Castillo.
El INYM acompaña desde el inicio. “A partir del primer año de funcionamiento de la EFA ya recibimos las becas, lo que significó que esos chicos puedan venir y ese aporte, junto a otros, hizo que podamos funcionar “, dijo. Este año son 16 los alumnos becados.
Yerba en las carpetas y en el terreno
Producción de Yerba Mate y Te es el nombre de la materia que dicta el profesor Martín Maciel.
“En esta EFA los chicos aprenden en el aula y aplican en la práctica todo lo referente a horticultura de hoja y bajo cubierta, vivero ornamental, crías de aves y cerdos, lombrices rojas californianas, cunicultura y producción de yerba mate”, detalló.
Maciel recordó que la Escuela está ubicada en una zona netamente yerbatera. “La mayoría de los alumnos son hijos de tareferos y productores”, expresó. El objetivo es que egresen con conocimientos y experiencia en el manejo del cultivo.
Para lograrlo, tanto docentes como alumnos se capacitan asistiendo a charlas y demostraciones de manejo de suelo y plantas en chacras vecinas, asistidos tanto por el INYM, como por el INTA y privados. “Actualmente contamos con una parcela propia donde se llevan adelante las labores culturales del cultivo, con técnicas tradicionales y nuevas”, acotó.
Queremos que nuestros técnicos agropecuarios egresen con herramientas que aporten al sector yerbatero”, enfatizó Maciel.
En esa línea, está en marcha la habilitación de un vivero de yerba mate, cuya estructura fue construida con la participación de los vecinos. “Estamos trabajando con trazabilidad. Nos capacitamos en la selección de las plantas madres porque apuntamos a contar con plantines de buena calidad”, destacó Maciel.
“Tenemos identificado el origen de las semillas, las características de las plantas madres y del ambiente donde crecen, eso nos da confiabilidad en la generación de plantines. Los alumnos, quienes participan en todo el proceso, van aprendiendo e interiorizándose”, manifestó.
Amigable con el ambiente
Toda la producción es agroecológica. En el vivero de yerba mate se utilizará el biofertilizante que el Servicio de Extensión Yerbatero del INYM viene impulsando en toda la zona productora y que en este lugar fue elaborado por los propios estudiantes con el asesoramiento de Damián Rivero y Daniel Fernández, también integrante del Servicio. “Ya pasamos la etapa de cómo preparar y el próximo paso es cómo aplicar, la dosificación del súper magro”, subrayó el técnico.
En esta EFA, el técnico del INYM acercó, a través de charlas y demostraciones en yerbales, conocimientos sobre análisis físico de suelo, cosecha de rama madura y manejo agroecológico del suelo. “La idea ahora es implementar talleres mensuales; el próximo tema será curvas de nivel, cubiertas de verano, y la implementación del biofertilizante”, enumeró Rivero, quien además asiste a 50 productores en Gobernador Virasoro, Garuchos y Garabí.