¿Por qué usar curvas de nivel y camellones en el cultivo de yerba mate?
Conservar la fertilidad del suelo para mejorar la disposición de agua y nutrientes que necesitan las plantas de yerba mate, es uno de los ejes de trabajo que los técnicos del Servicio de Extensión Yerbatero del INYM implementan junto a los agricultores.
En las siguientes líneas, el ingeniero agrónomo Gustavo Baumbgratz explica dos técnicas imprescindibles para lograr una producción sustentable:
Es de suma importancia mantener e incrementar la fertilidad del suelo, para la adecuada nutrición del cultivo de Yerba Mate.
Recordemos que en los primeros 20 centímetros de profundidad del suelo corresponden al Horizonte A, donde se concentran aproximadamente el 70 % de los nutrientes de suelo, razón por la cuál en dicha capa encontraremos la mayor concentración de raicillas absorbentes de una planta de Ilex paraguariensis. Por eso, es fundamental realizar prácticas tendientes a proteger y conservar la fertilidad química, física y biológica de este horizonte del suelo.
Entre varios factores que conducen a la pérdida de fertilidad de suelo, el principal se da a partir del proceso erosivo hídrico; precipitaciones abundantes e intensas con suelos agrícolas ubicados en pendientes, arrastran las partículas de suelos a las zonas más bajas del terreno y de ahí a los causes de los arroyos.
El problema se observa primeramente con erosión de tipo laminar (pérdida de materia orgánica que se traslada suspendida en el agua de escorrentía). Sí el proceso se agrava, se forman surcos (zanjas que podemos corregir con el laboreo de suelo con maquinaria) y finalmente podemos llegar a encontrar cárcavas, situación en la cual es más difícil y costoso revertir la situación debido a sus dimensiones y profundidad.
Varias son las tareas que contribuyen a proteger el suelo de la erosión, entre ellas mantener el suelo siempre cubierto con vegetación espontánea o cubiertas verdes, evitar el laboreo con implementos agrícolas que dejen al suelo desnudo y expuesto al impacto de la gota de lluvia y realizar el cultivo en curvas de nivel. Todas son necesarias para disminuir el proceso de erosión en el cultivo de Yerba Mate.
La práctica más importante al momento de planificar la plantación, son las curvas de nivel, que consisten en trazar líneas perpendiculares al sentido de la pendiente, logrando de esta manera disminuir la velocidad de escorrentía del agua proveniente de las precipitaciones que no ha logrado infiltrarse en el perfil del suelo.
Con la implementación de las curvas de nivel se logra:
- Disminuir la pérdida de fertilidad del suelo por erosión.
- Incrementar la infiltración del agua en el suelo, quedando la misma disponible para el cultivo de yerba mate y para el abastecimiento de las napas.
- Reducir volumen de escurrimiento superficial que llega aguas abajo.
- Despedir el agua que no logra infiltrar a velocidades no erosivas.
- Facilitar el trabajo con maquinaria, dado que el trabajo se realiza constantemente a nivel, sin pendientes.
La complejidad de la práctica de trazado de curvas de nivel, la define la pendiente del terreno. En suelos con pendientes menores al 3% (3 metros de altura vertical cada 100 metros de longitud), es suficiente con realizar la implantación del cultivo de Yerba Mate con los líneos del cultivo en curvas de nivel, cortando constantemente la pendiente.
En situaciones con laderas entre 3 al 12% de pendiente, es necesario, además del marcado de curvas de nivel, la confección de terrazas de desagüe (camellones).
¿Qué son los camellones y cuando usar o aplicar?
Los camellones son terrazas, canales, para evacuar el agua de escorrentía en forma controlada, sin que la misma genere procesos erosivos.
En nuestra región, las precipitaciones anuales se encuentran en torno a los 2.000mm, por lo tanto, las terrazas deben confeccionarse con declive, es decir, deben poseer pendiente para que cumpla la función de desagüe. La pendiente que se asigna a una terraza varía del 0,2 a 0,4%, con pendientes mayores las partículas de suelo son arrastradas dentro del canal del camellón.
El sistema de confección de terrazas con curvas de nivel, es complejo. Requiere el diseño completo del manejo de agua, que deben incluir las obras de desviación de excedentes de agua, tales como desagües empastados previamente, lomos de burros con pozos de decantación en caminos y drenajes. Además, mediante la planificación, es factible evitar las denominadas “cuñas” (líneos de cultivo cortos que terminan en otro líneo no paralelo) que dificultaban las labores con maquinarias.
El distanciamiento de las terrazas, dependerá de la pendiente. A mayor declive, las terrazas deben ubicarse más cercanas en el terreno. Contrariamente, en pendientes suaves, las terrazas de encuentran a mayor distanciamiento. Para los cálculos necesarios de la sistematización del terreno, el diseño, la consecuente marcación de las terrazas en terreno y el asesoramiento en el movimiento de suelo, se encuentra disponible el equipo de extensión del INYM.
Los camellones de desagüe se pueden confeccionar con diferentes implementos, rastras, arados de discos, arados taiperos e inclusive palas de acople a tercer punto del tractor o motoniveladoras.
La conservación de la fertilidad de suelo se traduce en mayores rendimientos en el cultivo de yerba mate y permanente en el tiempo.
Hay que tener en cuenta que estos trabajos deben estar planificados, haciéndolos en tiempo y forma.
En la sistematización de suelos, los caminos son parte importante del sistema productivo, al igual que las prácticas de manejo posteriores para la conservación del recurso.
El agua útil es aquella que infiltra en el suelo, no la que escurre en superficie llevando el suelo.