De esta manera, el director por la Producción en el INYM, Nelson Dalcolmo, se refirió a la jornada de poda de rama madura que compartió el 23 de marzo, junto a su par Jonás Petterson, con productores en el Lote 100, sobre Picada Ameghino, en Guaraní.

Organizado por el Servicio de Extensión Yerbatero del INYM y la Asociación de Productores Agropecuarios de Misiones (APAM), la jornada arrancó muy temprano y no obstante la niebla y el barro que se formó con la lluvia de estos días, se extendió durante toda la mañana con charlas y demostración de prácticas que permiten una buena regeneración de las ramas y hojas de yerba mate.

El tema convocante fue “Cosecha de rama madura”, con la disertación de los ingenieros agrónomos Pablo Herrera y Matías Bazila, del INYM. Se trata de una técnica que básicamente consiste en cortar las ramas de más de dos años de crecimiento, que son las que tienen mayor carga de materia prima, y dejar las ramas más jóvenes para que se desarrollen. “Es una práctica sustentable, necesaria si queremos asegurar un yerbal productivo a lo largo de los años, y que se complementa con cuidados que debemos tener con el suelo, manteniéndolo siempre protegido con material vegetal durante todo el año”, agregó por su parte Petterson.

El técnico Pablo Herrera, por su parte, describió a la cosecha de rama madura como “una técnica racional, donde se extraen las ramas que tienen color maduro y de más de una pulgada de diámetro para lograr la apertura de la planta”. En ese sentido aclaró que “primero se debe formar la planta, lo que lleva aproximadamente unos 4 años, y después de ese tiempo, se produce un mayor rendimiento que si se continuara con la cosecha tradicional”.

 La rama madura representa aproximadamente el 50 por ciento del rendimiento, mientras que la viruta, la limpieza, el raleo de ramas verdes y el despunte, juntos, producen el otro 50 por ciento del rendimiento, explicó Herrera.

El Servicio de Extensión Yerbatero del INYM promueve este tipo de acciones, orientadas todas garantizar la fertilidad del suelo, la permanencia del agua y la multiplicación de hojas y ramas en las plantas de yerba mate. “Hace pocos meses iniciamos este camino, y ya podemos ver buenos resultados, por el interés y concurrencia de los productores, lo que indica que el Servicio de Extensión fue una decisión acertada”, señaló Dalcolmo, al tiempo que agradeció “al dueño de la chacra que prestó su yerbal, a APAM y a todos los concurrentes”.