Productores de Montecarlo y Guaraypo aprendieron cómo preparar fertilizante orgánico para la yerba
Productores de Colonia Guaraypo y de Montecarlo, coordinados por la ingeniera agrónoma Silvina Machuca, del Servicios de Extensión Yerbatero del INYM, compartieron una jornada de elaboración de Súper magro, un fertilizante orgánico para multiplicar hojas de yerba mate.
La jornada se realizó en la chacra del productor Rolando Ebert, en Colonia Guatambu.
“Se hizo una demostración del preparado del fertilizante; los productores aportaron ingredientes y participaron en la elaboración”, dijo Machuca. “La respuesta de los participantes fue muy buena; quedamos que en un mes, a fines de noviembre, nos volvemos a juntar y repartir y para aplicar en la yerba”, agregó.
El Súper magro es un preparado líquido, basado en la descomposición de diversas materias orgánicas, y enriquecido con sales minerales que se aplica como abono foliar para solucionar deficiencias de nutrientes y proteger a los cultivos de enfermedades.
Productor solidario
Como dato a destacar, Víctor Samudio Aquino regaló a los presentes una caja con plantines de maní forrajero para que los productores lleven a su yerbal y multipliquen como cubierta verde.
“Fue una sorpresa para todos”, indicó Machuca. “Hace algunos meses, Víctor, quien trabaja en el vivero municipal de Montecarlo, se llevó una mudas de esa cubierta y prometió generar plantines para los demás productores, y lo hizo. Su gesto, que agradecemos mucho, fue muy bien recibido”, manifestó.
El maní forrajero (Arachis pintoi) es una de las alternativas para cubiertas verdes en los yerbales. Contribuye a la fertilidad del suelo porque promueve el reciclado de nutrientes, evita la erosión, no permite el crecimiento de otras herbáceas arvences, y mitiga el daño que provocan las altas temperaturas en verano.
“Se lo puede plantar en cualquier época del año, pero se debe tener en cuenta que es una especie sensible al frío, y si se planta en verano, que sea en un lugar con algo de sombra”, explicó la ingeniera.
“Para constituir el semillero, lo ideal es plantar en tierra colorada con un poco de abono, en el patio de la casa, en cajones o directamente en el yerbal, regar de vez en cuando hasta que comience a brotar con fuerza, y controlar las hormigas. Con eso, es suficiente para que multiplique mudas y se expanda”, concluyó.