Cumplimos 18 años de servicios al sector yerbatero
Este 19 de julio se cumplen 18 años de la primera reunión del Directorio
Este 19 de julio se cumplen 18 años de la primera reunión del Directorio.
“Fue el acto formal fundacional del INYM, por eso lo recordamos, y en la celebración nuestro homenaje a quienes dieron origen a la Institución, a los productores que se manifestaron hasta lograr que se atendiera su reclamo; también a quienes trabajan en los yerbales, en los secaderos y en los molinos generando el mate de todos los días y a los empleados del Instituto que durante todo este tiempo estuvieron brindando servicios al sector”, contextualizó el presidente del INYM, Juan José Szychowski.
El INYM se creó en el año 2002 como respuesta a la manifestación bautizada como “Tractorazo” que lideraron mujeres y hombres agobiados por la crisis económica que golpeaba al país y marcharon en caravana desde sus chacras hasta la plaza 9 de Julio de Posadas, permaneciendo allí durante más de 50 días hasta recibir respuesta del Gobierno de la Nación.
El 21 de febrero de 2002 el Congreso de la Nación sancionó la Ley 25.564 de creación del INYM (se promulgó el 14 de marzo, sin intervención del Poder Ejecutivo); el 13 de julio del mismo año el presidente de la Nación, Eduardo Duhalde, firmó el Decreto Reglamentario 1240 y el 19 de julio se realizó la Primera Reunión formal de Directorio, espacio donde tienen representación todos los eslabones de la cadena yerbatera, el Gobierno Nacional los gobiernos de las provincias de Misiones y Corrientes.
En ese primer encuentro el tema más importante a resolver en forma conjunta fue recomponer los valores de la materia prima, estableciéndose en 13,5 centavos el kilo de hoja verde y en 50 centavos el de la canchada para el período de julio - octubre de aquel año.
PRIMER DIRECTORIO
Integraron el primer Directorio del INYM el ingeniero agrónomo Daniel Notta como presidente, quien renunció el 13 de septiembre de 2002 y fue reemplazado por José Domingo Fabio, a su vez representante del Gobierno de Misiones y cuyo suplente fue Ricardo Maciel; por el Gobierno de Corrientes: Estela Robaina (titular) y Ernesto Yacovich (suplente); por la Industria: Miguel Sniechowski y Marcelo Martín (titulares), Carlos Barros y Rubén Nielsen (suplentes); por Tareferos: Carlos Cardozo (titular) y Florencio Zena (suplente). por Cooperativas: Roberto Swier y Pedro Angeloni (titulares), Juan Dimitrowicz y Roberto Buser (suplentes); por la Producción: Hugo Sand, Jorge Haddad y Manfredo Seifert (titulares); Juan Tarasiuk, Marta Giménez y Eduardo Tuzinkiewicz (suplentes); por Secaderos: Sergio Bazila (titular) y Ernesto Morales (suplente).
Casi dos décadas después también se cuenta con otras herramientas fundamentales como los datos estadísticos y la información acerca de quienes integran la cadena yerbatera, lo que permite el Instituto definir acciones con proyección
- Más de 100 mil personas en MATEAR, la feria del mate.
- Presentacion del manual de propagación vegetativa de plantines (mayo 2019)
En ese sentido, Szychowski destacó otros importantes logros del INYM “como promover la incorporación de tijeras electrónicas, guinches y carritos de arrastre optimizando las cosechas y generando mejores condiciones de trabajo; quemadores de chip en los secaderos resolviendo la falta de leña; Corresponsabilidad Gremial para los tareferos; becas para los hijos de agricultores; programas de Buenas Prácticas en producción, secaderos y molinos para certificar la calidad del producto; trabajo en conjunto con empresas para conquistar nuevos consumidores en mercados distantes como Medio Oriente, Estados Unidos y Europa y en otros más cercanos como Chile; y estudios científicos que revelan excelentes propiedades del alimento, el más conocido quizás sea el que certifica su poder antioxidante, lo que despierta mucho interés y abre otras posibilidades comerciales”.
Szychowski afirmó sentirse “orgulloso de ser parte del INYM porque representa mucho más que una Institución que trabaja para fortalecer a todos los eslabones de la cadena yerbatera; la yerba mate es transversal a todo y a todos, desde aquellos primeros cultivos hace más de cien años hasta hoy día, y cada acción que vamos definiendo está impregnada por la determinación y el compromiso de contribuir al crecimiento de todo el sector”.
El actual Directorio del INYM está integrado por el Presidente Juan José Szychowski; los representantes de Misiones: Ricardo Maciel (titular) y Marta Cunha (suplente); de Corrientes: Esteban Fridlmeier; de Cosecheros: Ramón Antonio Segovia (titular) y Rubén Oscar Alvez (suplente); de la Producción: Jonas Petterson, Claudio Marcelo Hacklander y Nelson Dalcolmo (titulares); Jorge Butiuk, Carlos Zuberbühler y Marisol Fracalossi (suplentes); de Secaderos: Alejandro Lucero (titular) y Sergio Delapierre (suplente); de Cooperativas: Denis Alfredo Bochert y Danis Luciano Koch (titulares); Gerardo Ramón Vallejos y Isaias Angel César Villalva (suplentes), y de la Industria: Raúl Ayala Torales y Germán Horrisberger (titulares); Guillermo Rousillion y Gerardo Daniel López (suplentes).
Yerbales y cosechas más eficientes
El INYM implementó y tiene vigente diversos programas orientados a fortalecer todos los eslabones de la cadena yerbatera.
En un breve repaso desde su fundación, cabe destacar la incorporación de nuevas herramientas que evitan la actividad física extrema en el traslado y la carga de raídos y optimizan las cosechas, como los guinches y carritos de arrastre (por reglamento, estos implementos deben ser construidos en talleres de zona productora, incentivando la industria local), y las tijeras electrónicas que se entregan a través de Plan de Mejoramiento de la Cosecha de Yerba Mate.
En la misma línea, está el Programa de Motoguadañas y Motosierras para ser utilizadas en las plantaciones de yerba mate, y también como herramientas de trabajo en el período interzafra. Permiten el control mecánico de malezas que compiten con el cultivo y, en paralelo, aporta materia orgánica mejorando la estructura y la conservación del recurso suelo.
Entre los años 2008 y 2010 a través de la Red de Productores Evaluadores, el INYM realizó más de 600 análisis de suelos e incentivó el uso de cubiertas verdes para recuperar la fertilidad del suelo de los yerbales. Luego, en el año 2012, vendría el Programa de Renovación de Viejos Yerbales, que hoy beneficia a 360 pequeños productores de hasta 10 hectáreas de superficie cultivada en estado de degradación, y que consiste en la implantación de una hectárea de yerba mate con material genético y tecnología de punta, con el compromiso de que al quinto año esas tres hectáreas de yerbales ineficientes se direccionen a otra actividad agropecuaria o forestal.
El año pasado comenzó el Programa de Asistencia Técnica a Pequeños Productores Yerbateros, una iniciativa que permitió la incorporación de técnicos para brindar asistencia integral a 20 grupos de 30 productores con diagnóstico físico – productivo y ambiental (incluido análisis físico químico de los suelos) y prácticas para mejorar los yerbales.
El uso de chips de madera como fuente de calor en los secaderos es otro de los avances en el sector yerbatero que llegó de la mano del INYM con el Programa de Tecnificación del Proceso de Secado y que tiene como objetivo dar respuesta a una creciente problemática del sector: la falta de leña.
El funcionamiento de este sistema – que es más amigable y eficiente en términos sociales y económicos- fue una bisagra, ya que dejó atrás un combustible utilizado desde los orígenes del proceso de elaboración de la yerba y apareció en el momento justo, poco antes de entrar en vigencia la Ley Provincial 106 que desde 2015 prohíbe en Misiones utilizar como leña a la madera de monte nativo.
Mediante el Programa de Optimización de la Energía en Secaderos de Yerba Mate, el INYM respalda la instalación de coberturas, no contaminantes, de fácil aplicación y de eficiencia probada, que permitan mejorar el rendimiento térmico de las tamboras de secado de la materia prima, y en ese marco se evalúa el rendimiento del gas licuado de petróleo (GLP) como combustible para generar calor.
Para mejorar el traslado del producto el INYM puso en marcha el Programa de Adaptación y Equipamiento de Vehículos para Transporte de Hoja Verde a Granel, y para recepción, control y acondicionamiento, el Programa de Playas Móviles.
Desde mayo de 2015, está vigente el Convenio de Corresponsabilidad Gremial (CCG) que promueve el cumplimiento de las obligaciones que impone el Sistema de la Seguridad Social de la Nación y que deben hacer efectivo quienes emplean personal en las tareas de cosecha y secanza de la yerba mate (productores, prestadores de servicio de cosecha y flete y secadores). El INYM es el agente de instrumentación y percepción de la Tarifa Sustitutiva del CCG.
En estos 18 años la capacitación se hizo extensiva tanto a tareferos como a productores, con jornadas sobre suelo y prácticas de cosecha, uso de elementos de protección y medidas preventivas para evitar accidentes laborales, legislación sobre derechos del trabajador y obligaciones del empleador, y normas que rigen para el trabajo infantil, evitando el empleo de menores de 16 años en cualquier régimen laboral.
Preservar la calidad
Desde el año 2016, el INYM promueve las Buenas Prácticas en Manufactura (BPM) poniendo a disposición la posibilidad de realizar sin costo la auditoría previa a la certificación que otorga el Instituto Argentino de Normalización y Certificación IRAM. A la fecha 13 secaderos y un molino de la zona productora ya obtuvieron su certificado en BPM a partir de este programa, garantizando que la yerba mate se obtiene optimizando los procesos de elaboración y bajo el cumplimiento de todas las normas de seguridad del personal.
En el 2013 la yerba mate fue declarada Infusión Nacional por el Congreso de la Nación, un respaldo al alimento que eligen todos los días los argentinos y que gana espacio en diferentes partes del mundo.
Mediante una tarea conjunta entre el INYM y las empresas del sector, el producto fue ampliamente promocionado dentro y fuera del país, posicionándose en Chile, Estados Unidos, Medio Oriente (Siria y Líbano) y Europa (Francia, España y Alemania) y adaptándose a las diferentes formas de consumo. En la Argentina, logró reconocimiento propio con la feria MATEAR, en Buenos Aires, que el año pasado reunió a más de 100 mil visitantes.
Mate seguro, en tiempos de pandemia
Recientemente, ante la emergencia sanitaria por Covid 19, la yerba mate fue la primera cadena agroindustrial de la Argentina que se comprometió con medidas concretas para asegurar el cuidado de la salud de quienes trabajan en el sector y de quienes consumen el producto.
El INYM lanzó la campaña masiva a nivel nacional “Tomá mate, tomá precauciones” brindando información clara y relevante sobre los recaudos que debemos tener a la hora de tomar la Infusión Nacional, y entregó a los productores y prestadores de servicios kits sanitarios para que los tareferos puedan realizar sus tareas minimizando los riesgos, garantizando la permanencia de la yerba mate como un producto natural, saludable y seguro en todo el país y en distintas partes de mundo.
El área de Fiscalización del INYM asesora y realiza controles (en establecimientos, rutas y chacras) para el cumplimiento de normas de traslado y la manipulación de la materia prima; asimismo, toma muestras de los paquetes de yerba mate en góndolas, a través de lo cual se conoce y preserva la calidad del alimento.
Educación e investigación para el desarrollo
Entre las funciones del INYM -indica la Ley 25.564- se encuentra la de facilitar capacitación específica y formación de recursos humanos de quienes brindarán sus conocimientos en beneficio del sector yerbatero.
En ese marco, el Directorio de la institución resolvió, a partir del 2007, financiar investigaciones científicas para determinar las propiedades benéficas que tiene la yerba mate en la salud, mejorar las condiciones de trabajo y optimizar la calidad y eficiencia del sector; y a partir del 2011, otorgar becas secundarias y luego también universitarias.
Las investigaciones, además de mejorar el sector, fomentan el desarrollo científico, generan trabajo y sus resultados apuntan a todo el circuito yerbatero. Es así que a técnicos e investigadores de las más importantes instituciones y unidades agrarias y académicas del país ya han concretado importantes avances sobre mejoramiento genético y propagación de plantas; fisiología, manejo sanitario y nutrición; y sistemas de cosecha, herramientas, maquinarias y logística en producción primaria de yerba mate.
Resulta importante recordar aquí –entre muchos otros- el estudio que revela que quienes consumen yerba mate en sus diversas modalidades -mate, mate cocido o tereré- incorporan al organismo una importante cantidad de polifenoles totales, que son los antioxidantes que mejoran las defensas naturales del organismo y lo protegen contra el daño celular que causa que el cuerpo se deteriore.
En el 2017 el INYM creó la Base de Datos Documental Bibliográfica sobre Yerba Mate y Salud que reúne 224 publicaciones, y desde ese año, junto al Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), el máximo organismo referente en ciencia de la Argentina, cofinancia becas Doctorales y Postdoctorales para desarrollar estudios.
Las Becas Estudiando con el Mate para alumnos de escuelas secundarias y universitarias es una medida orientada específicamente a hijos de productores y trabajadores del sector yerbatero, que cursan en escuelas con orientación agrícola o en facultades las carreras de Ingeniería Agronómica, Ingeniería en Alimentos, Ingeniería Electromecánica e Ingeniería Química, en Misiones y Corrientes, completando así un abanico de posibilidades para el estudio e incentivos de temas vinculados al sector.
Finalmente, se destaca la brújula que marca el norte del INYM por los próximo años: el Plan Estratégico para el Sector Yerbatero, un logro de casi dos años de trabajo (2012 – 2013) que reúne las líneas de acción consensuada por todos los sectores que integran la actividad yerbatera y que fue generado con el apoyo de los Gobiernos de las Provincias de Misiones y Corrientes, el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y la Universidad Nacional de Misiones (UNAM).